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Consumo de alcohol y riesgo de fibrilación auricular

Actualizado: 1 feb 2022


Durante la realización del 42 Congreso Nacional de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), se analizó la evidencia científica más reciente disponible en relación al consumo de alcohol y el desarrollo de patologías cardiovasculares en general y de la fibrilación auricular en particular.


El consumo de alcohol causa el fallecimiento de dos millones de personas al año en todo el mundo, siendo 20% de estas muertes atribuible a enfermedades cardiovasculares. Una de las mesas redondas del Congreso trató sobre Alcohol y riesgo cardiovascular, en la cual se resaltó que la ingesta habitual de esta sustancia es el principal factor de riesgo de muertes prematuras entre los 15 y los 49 años.¹


El Grupo de Alcohol y Alcoholismo de la Sociedad Española de Medicina Interna indica que además del conocido efecto sobre la miocardiopatía alcohólica y la hipertensión arterial, el consumo de alcohol, aunque sea a dosis equivalentes a un vaso de vino o una cerveza al día, incrementa el riesgo de fibrilación auricular. Estudios epidemiológicos muestran claramente que el consumo de alcohol, incluso en bajas cantidades, supone un factor de riesgo independiente de fibrilación auricular.


Un ensayo clínico mostró cómo dejar de beber completamente tras un primer episodio de fibrilación auricular, fue eficaz para reducir las recurrencias y, por tanto, es la medida preventiva más efectiva que podemos recomendar si aparece esta arritmia.² Además, el consumo de alcohol en pacientes que ya tienen fibrilación auricular está asociado a un mayor riesgo de ictus.


En base a estas evidencias y respecto a su potencial impacto en el caso concreto de los jóvenes, teniendo en cuenta los altos índices de ingesta alcohólica que existen en este segmento de edad de la población española, los especialistas señalaron que el consumo actual en la juventud sigue un patrón de consumo intensivo o binge drinking, que se conoce está asociado con el desarrollo de arritmias o ‘corazón del día de fiesta’. Sin embargo, aunque con toda seguridad su efecto es perjudicial, dado que es más habitual en jóvenes y que la fibrilación auricular aparece en edades más avanzadas, no se posee datos a largo plazo para cuantificar este impacto.


Los especialistas hicieron hincapié en la necesidad de una mayor precisión en las recomendaciones respecto a las cantidades de ingesta alcohólica, concretando qué se entiende realmente por "consumo moderado" o "a bajas dosis". El término "consumo moderado" debería sustituirse por el de "consumo de bajo riesgo", insistiendo en la evidencia de que incluso pequeñas cantidades de alcohol se asocian con un bajo, pero significativo incremento del riesgo de determinadas patologías.


El límite para este consumo de bajo riesgo o moderado se ha ido reduciendo en los últimos años, en la actualidad se considera que es de 20 g de alcohol al día para los hombres y 10 g para las mujeres, 10 g equivalen a un vaso de vino o una cerveza. Los especialistas resaltaron que la pauta de "alcohol cero" es imprescindible en caso de embarazo, menores de edad, conducción o manejo de maquinaria peligrosa y en presencia de enfermedades o consumo de fármacos que contraindiquen su consumo. En el resto de situaciones, el mensaje más adecuado (y menos utópico) es el de ‘alcohol, cuanto menos, mejor’.


Cualquier consumo de cualquier bebida alcohólica y cualquier patrón de consumo, suponen un elevado riesgo poblacional de desarrollar una adicción a esta sustancia, de contraer enfermedades agudas y crónicas, de sufrir accidentes y de producir daños a terceros, de ahí la necesidad de que los gobiernos implementen políticas públicas que protejan a la población del marketing depredador del alcohol, concluyeron los especialistas.


Referencias


  1. Martín CG. Alcohol y riesgo cardiovascular, ¿qué nos dice la evidencia? 42 Congreso Nacional de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI). Presentado el 25 de noviembre de 2021.

  2. So-Ryoung L, Eue-Keun Ch, Jin-Hyung J, Kyung-Do H, y cols. Lower risk of stroke after alcohol abstinence in patients with incident atrial fibrillation: a nationwide population-based cohort study. Eur Heart J. 7 Dic 2021;42(46):4759-4768. doi: 10.1093/eurheartj/ehab315. PMID: 34097040. Fuente

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