Investigadores de la University of California en San Francisco, Estados Unidos, presentaron los hallazgos de un estudio que utilizó imágenes infrarrojas de los párpados en 120 pacientes con ojo seco. Los resultados fueron expuestos durante una conferencia virtual, originalmente programada para el congreso ENDO 2020.¹
La pérdida de las glándulas de Meibomio de los párpados, que contribuyen a producir lágrimas, al parecer se asocia a tasas elevadas de ojo seco en personas con diabetes y se podría utilizar como biomarcador de un control no óptimo de la glucemia, indicaron los investigadores.¹
La falta de glándulas de Meibomio puede originar ojos secos, dolor ocular, malestar y visión borrosa.
Las glándulas de Meibomio son las estrías verticales que revisten los bordes de los párpados inferiores; producen el lípido que se combina con líquido acuoso de la glándula lagrimal para crear una película de lágrimas.
El ojo seco afecta a casi 7% de la población estadounidense, mientras que en personas con diabetes tipo 1 se presenta en el 57% y en el 70% de los pacientes con diabetes de tipo 2.
Los mecanismos propuestos por los investigadores para el fenómeno en la diabetes son la microisquemia y la inflamación.
En el estudio, la pérdida de las glándulas de Meibomio fue mucho más frecuente entre los 60 participantes con ojo seco y diabetes que entre los 60 participantes con ojo seco sin diabetes, y la cantidad de pérdida de glándulas se vinculó directamente con el nivel de hemoglobina glucosilada.
Los investigadores señalaron que muchos teléfonos inteligentes modernos, tienen cámaras de rayos infrarrojos que podrían ayudar a caracterizar el ojo seco en pacientes con diabetes, con lo cual se espera que en el futuro los pacientes puedan utilizar sus teléfonos inteligentes, enfocarlos en sus propios párpados y tomar una fotografía, lo cual sería de gran utilidad a nivel de los centros de salud comunitarios especialmente a nivel rural.
Es importante que los médicos que atienden a personas con diabetes sepan que esta enfermedad conlleva alta incidencia de disfunción de las glándulas de Meibomio, lo que conduce a sequedad ocular, este es otro motivo por lo que los pacientes diabéticos deben asegurarse de acudir a su oftalmólogo con regularidad.
Los investigadores revisaron de forma retrospectiva registros médicos electrónicos de 120 pacientes con diagnóstico de ojo seco, 60 con diabetes y 60 sin diabetes tipo 2.
Las personas con diabetes tenían una media de edad de 65 años y fueron hombres y mujeres de manera proporcional. Los controles eran más jóvenes, tenían un promedio de 54 años y estaban representados por 37 hombres y 23 mujeres.
Los investigadores obtuvieron imágenes del párpado con rayos infrarrojos (820 nm); se calculó el porcentaje de pérdida de glándulas de Meibomio para cada ojo, y luego se promedió por paciente.
Observaron que 51,5% de los pacientes del grupo con diabetes había perdido glándulas de Meibomio, en comparación con solo 11,3% de los controles, una diferencia muy significativa (p = 0,0001).
Cuando se evaluó también la hemoglobina glucosilada, solo cuatro de 60 participantes con hemoglobina glucosilada ≤ 5,9% tuvieron pérdida ≥ 25% de las glándulas, en comparación con 55 de 60 participantes con hemoglobina glucosilada ≥ 6,0%.
En los pacientes con diabetes, 35 de 37 con hemoglobina glucosilada > 6,6% perdieron > 40% de las glándulas, en comparación con solo 12 de 23 participantes con hemoglobina glucosilada < 6,5% (p < 0,0001 para todos).
Los investigadores indican que en pacientes con ojo seco y diabetes, la pérdida de las glándulas de Meibomio se asocia a elevación de la hemoglobina glucosilada, por lo que puede estar indicado un monitoreo adicional del estado diabético del paciente.
Hay que tener en cuenta que en algunos pacientes que reciben tratamiento intensivo del ojo seco con lágrimas artificiales o ciclosporina, las glándulas vuelven a crecer aproximadamente seis meses después.
La utilización del teléfono inteligente en especial en una región donde podría no ser fácil determinar hemoglobina glucosilada, sería de mucha utilidad para el médico de atención primaria especialmente en lo relacionado con el control de la diabetes de sus pacientes.
Los hallazgos parecen indicar que la pérdida de las glándulas de Meibomio se podría utilizar como biomarcador de la diabetes, en particular en lugares desatendidos en los que las pruebas de hemoglobina glucosilada podrían no ser fácilmente accesibles.
Referencias
1. Wu G. Loss of Tear Glands Indicative of Higher HbA1c Levels. Abstract MON-704. ENDO 2020. Presentado el 30 de marzo de 2020; San Francisco, Estados Unidos
Comments